Cuando uno está enfermo o lesionado, espera que los profesionales médicos a los que acude le ayuden, no que le hagan daño por negligencia. Sin embargo, estudios recientes muestran que los errores médicos son la tercera causa de todas las muertes en los Estados Unidos.
Estos errores médicos evitables tienen profundas repercusiones en las personas lesionadas, en sus familias y en nuestra sociedad.
Las lesiones por negligencia médica más comunes incluyen infecciones, derrames cerebrales, deformidades, sepsis, daños nerviosos, daños cerebrales y la muerte.
Las causas de estas lesiones pueden variar desde fallos del médico en el diagnóstico o una mala técnica quirúrgica hasta una mala formación del personal de enfermería.
A menudo, la causa fundamental es simplemente no prestar la debida atención a los signos y síntomas del paciente.